Santa Claus guarda mujeres en su bolsa?

De principios de Diciembre hasta que termina el año se podrán ver miles y miles de posts de gente renegando sobre la Navidad y sintiéndose cool por creer que son los únicos apáticos respecto a estas fechas; una forma fácil y rápida de sentirse grandecito.

Es mi turno entonces de hablar sobre mi apatía a la Navidad.

Sinceramente, a esta edad me da igual pero justifico y disfruto su existencia. De no ser por la navidad, estas fechas serían una basura total. Nos quedaríamos celebrando solamente el cierre del año, pagando y disfrutando de nuevos impuestos; para los que tienen exámenes regresando de vacaciones, no habría motivos suficientes para hacer fiestas desde martes hasta domingo sin parar; en el caso de las mujeres, no podrían posponer su dieta para "terminando las fiestas" y no existirían los pretextos perfectos para atascarse de comida hasta que salga disparado el último botón de la camisa.

Me cagan los niños de cierta edad, pero ver que se entretienen con la ilusión de recibir un regalo pronto es algo que se puede gozar. Y hasta le puedes sacar provecho "quédate quieto o Santa no te traerá nada".

Sí, hablo de Santa Claus por que vengo del D.F. La versión hidrocálida de Santa Claus aquí en Aguascalientes es el famoso Niño Dios. Creo que en otras regiones también se celebra igual. No sé, me parece más rídiculo creer que un niño, que además es Dios, se el que regala los juguetes (si yo fuera él, me los quedaba). Prefiero creer que un señor gordo y barbón tiene la condición suficiente como para viajar por todo el mundo y repartir regalos. Es más fácil mentarle la madre a él que a un niño en caso de que no recibas lo que quieres.

También es entretenido ver a las señoras y mujeres volverse locas por adornar todos los lugares donde pasan por lo menos más de 30 minutos diarios. Después de ver todo el tiempo igual tu oficina y tu casa, no cae nada mal ver un montón de adornitos colgados por todas partes; sabemos que no durará toda la vida (y sabemos que tarde o temprano tendremos que ayudar para ponerlos y/o quitarlos...).

Pocas veces recibí lo que quería para navidad, pero casi siempre quedé satisfecho. Los dos regalos que más recuerdo fueron el videojuego de The Legend of Zelda: Ocarina of Time para Nintendo 64 (en esos tiempos ya no era Santa Claus) y hace un prostitutamadral de años recibí unas motos con Charlie Brown, Snoopy y Woodstock. Desgraciadamente no sé dónde están (pero seguro que todavía existen) y no puedo enseñarles una foto, pero lo que sí puedo presumir son otros de mis regalos favoritos:

Así es! Donatello de basketbolista, Rafael de beisbol, Leonardo (qué muñeco tan más chingón) de americano y Miguel Angel de skate (hasta su patineta tenía!). Esos eran buenos tiempos.

Estos muñequitos de Street Fighter eran la onda. Obviamente, Ryu no usaba lentes, se los puse con plastilina hace muuucho para que se viera más cool; si Chun-Li parece Cuauhtemoc Blanco fue por que el mero día que recibí ese muñeco, un primito envidioso la mandó por los aires hasta estrellarse con un mueble; y el look tan fashion de Guile fue debido, seguramente, a un percance sufrido cuando tenía obligado recoger "todo mi tiradero", uno solo avienta todo al cajón sin importarle que la pierna de alguien se quede afuera. El dueño de la pierna donada ya estaba muerto, no se preocupen.

Ahora, las nuevas cartitas a los Reyes Magos y Santa Claus incluyen BlackBerrys, iPods, Mini-Laptops y Wiis. Qué bueno que no soy papá...