sábado, mayo 05, 2007

Walking in my shoes

Hoy se cumple exactamente un año del concierto de Depeche Mode en México al que por razones obvias asistí. No pienso hacer una reseña ni nada por el estilo, dado que ya lo he mencionado a todas las personas que conozco y ya hay una en este blog (vean la primera entrada).

Me resulta incómodo y difícil decidir entre "cuál estuvo mejor, Rammstein o Depeche Mode?". Los dos fueron un shock brutal, los dos fueron espectaculares y los dos los disfruté al máximo. Pero son situaciones diferentes y tiempos muy distintos como para hacer una comparación. Lo que sí es que se cumple un año, un año en el que han pasado muchas cosas, han cambiado algunas otras, algunas para bien, otras para mal, otras quien sabe. Pero eso no importa cuando se escucha la música. Me gustaría verlos de nuevo? Claro, pero sé que no sería lo mismo. La "primera vez" es la mejor (por lo menos en el caso de los conciertos sí), así que preferiría ver, por ejemplo, a Björk para morir agusto. Después de ella no sé qué más podría ver que no haya visto antes. Y, pues ya dije, o viene ella, o voy yo, nomás es cosa que se acerque tantito (escuchen su nuevo cd, Volta!!).

Nostalgia?... Sí, pero de la bonita. Se siente bien saber que fui a ver a Depeche Mode en vivo y en directo.

No hay comentarios.: